jueves, agosto 19, 2010

Pa´ pinches 500 dólares...

Hoy tampoco me libré de las viejas locas. Es como si su nave nodriza acabara de aterrizar justo en donde vivo. No me tocó en el negocio, pero sí a la hora de ir al banco.

La mujer tenía detenida la fila de clientes porque había ido a cambiar unos dólares y la muy mamona no quería traer "tantos billetes". Pá los pinches 500 dólares pedorros que cambió y todavía se pone sus moños. Es como los cagaleros que llegan al negocio de cajas y no quieren que les dé feria en "moneditas". Como si no fuera dinero. Aparte, las moneditas ayudan a que uno se vea más riatón de lo que está. Inténtenlo y verán.

Bueno, total que la ñora hizo que la cajera -la única que había- hablara a tres sucursales del banco para ver si ahí tenían billetes de a 100, porque los de 50 y 20 "le hacían mucho bulto y ahorita las cosas están muy feas", decía refiriéndose a la inseguridad; como si "los malitos" tuvieran visión de rayos láser y vieran a través de las bolsas de las viejas necias cuánto dinero traen, y, si traen muchos billetes, sí las asaltan, y si no, no.

La cajera, harta, reaccionó, y se puso al nivel de la vieja loca diciéndole: "Los billetes de 100 son mucho más llamativos, señora; aparte nos han tocado algunos casos de billetes falsos de esa denominación. ¿No prefiere mejor que le dé 10 billetes de 50?".

Y la vieja loca aceptó.

Me quedé con ganas de salir corriendo detrás de ella, gritando como enfermo y arrebatarle la bolsa -en broma-, para sacarle un buen pedo y ver si así se deja de mamadas a futuro.