Repetir patrones. La mayoría de las personas cree que de eso trata la vida.
No cuestionan, no buscan, no ven alternativas. Tampoco se las ofrecen.
Cuando sienten que tienen otra opción, ya están contra la pared.
“Así es esto, no hay de otra”, es una de las frases características de los adultos, que viven resignados, repitiendo las frases que escucharon de sus padres, creyendo que lo mejor es aplicar esas enseñanzas con sus hijos.
Otra de sus frases favoritas es: “No le des el pescado, mejor enséñalo a pescar”.
Un absurdo en un mundo como el de hoy. Un pretexto para quienes no supieron –metafóricamente- construir una represa o racionar sus peces.
¿Enseñarlos a pescar? ¿En dónde?, me pregunto yo, si los muelles tienen dueño, la poco agua que hay está contaminada y la pesca sobreexplotada.
Con esa filosofía no van a garantizarle el futuro a sus hijos.
Buena suerte a todos ésos que trajeron niños al mundo y les están enseñando a pescar en vez de darles el pescado. Espero todavía encuentren sedal, anzuelos, muelles, agua y -sobre todo- peces.
No cuestionan, no buscan, no ven alternativas. Tampoco se las ofrecen.
Cuando sienten que tienen otra opción, ya están contra la pared.
“Así es esto, no hay de otra”, es una de las frases características de los adultos, que viven resignados, repitiendo las frases que escucharon de sus padres, creyendo que lo mejor es aplicar esas enseñanzas con sus hijos.
Otra de sus frases favoritas es: “No le des el pescado, mejor enséñalo a pescar”.
Un absurdo en un mundo como el de hoy. Un pretexto para quienes no supieron –metafóricamente- construir una represa o racionar sus peces.
¿Enseñarlos a pescar? ¿En dónde?, me pregunto yo, si los muelles tienen dueño, la poco agua que hay está contaminada y la pesca sobreexplotada.
Con esa filosofía no van a garantizarle el futuro a sus hijos.
Buena suerte a todos ésos que trajeron niños al mundo y les están enseñando a pescar en vez de darles el pescado. Espero todavía encuentren sedal, anzuelos, muelles, agua y -sobre todo- peces.