Después de que un pitbull se chingara a mi perro chihuahueño -el Cucho-, mi madre, preocupada de que a diario llegara a mi casa y no tuviera –literalmente- perro que me ladrara, snif, se puso en contacto con los dueños de los papás del Cucho para que le avisaran cuando tuvieran otra camada de cachorros. Como sabrán, mi padre es veterinario y mi madre ha administrado por casi 30 años la clínica de su propiedad, por lo que ambos conocen todos los tejes y manejes del mundo canófilo. Y total que en febrero, dos meses después de que el Cucho colgara las garras, mi madre me regaló de sorpresa un nuevo Cucho, para que volviera a tener perro que me ladrara. Chale… lo que llega a hacer una madre cuando tiene hijos subnormales, snif.
El nuevo Cucho se ha adaptado a la casa y al negocio de cajas y yo me he adaptado a él, porque, según yo, no iba a volver a tener perros y me iba a ir de pueblo en pueblo lloriqueando: “Aaayyy, mis perrooos”, como la Llorona. Pero bueno, no se hizo.
El Cucho ya se cree el guardián de la bodega y ya sabe orinar encima de periódicos y montarse a un muñeco de peluche que tiene un agujerito entre las piernas. Incluso los sábados se despierta muy entusiasmado –más que yo- para ir a trabajar. Miren nomás cómo acomoda esos montones de cajas. Yo se las aviento desde afuera y él salta y las cacha con el hocico y las pone bajo sus patas. Es un pro el güey. Írenlo en acción:
Después de una jornada de medio día, llegamos a casa, salimos a la terraza y me doy cuenta que los tomates que sembré ya dieron fruto... después de como mil intentos y millones de semillas sembradas. Arranco cuatro frutitos. Me como dos yo y le doy dos al Cucho. Están muy buenos. Esto hay que celebrarlo.
Limpio la parilla del ataúd, coloco algo de carbón, saco unos leños -por si las dudas-, marino unos pollos, meto cervezas al congelador y espero en una silla de la terraza, viendo hacia el árbol cuyo ramaje cubre casi en su totalidad el balcón. El Cucho se vuelve loco con tantos olores, tantos insectos y tanto sonido de pájaros.
Es domingo de terraza en Güffeldorf, esa pequeña y pacífica potencia mundial perdida entre las montañas de la ciudad de Monterrey, donde se fusila a quienes llevan platos y vasos deshechables o tiran las latas de aluminio en la misma bolsa donde pongo los restos de la comida. Sean bienvenidos a este civilizado y hermoso lugar.
El nuevo Cucho se ha adaptado a la casa y al negocio de cajas y yo me he adaptado a él, porque, según yo, no iba a volver a tener perros y me iba a ir de pueblo en pueblo lloriqueando: “Aaayyy, mis perrooos”, como la Llorona. Pero bueno, no se hizo.
El Cucho ya se cree el guardián de la bodega y ya sabe orinar encima de periódicos y montarse a un muñeco de peluche que tiene un agujerito entre las piernas. Incluso los sábados se despierta muy entusiasmado –más que yo- para ir a trabajar. Miren nomás cómo acomoda esos montones de cajas. Yo se las aviento desde afuera y él salta y las cacha con el hocico y las pone bajo sus patas. Es un pro el güey. Írenlo en acción:
Después de una jornada de medio día, llegamos a casa, salimos a la terraza y me doy cuenta que los tomates que sembré ya dieron fruto... después de como mil intentos y millones de semillas sembradas. Arranco cuatro frutitos. Me como dos yo y le doy dos al Cucho. Están muy buenos. Esto hay que celebrarlo.
Limpio la parilla del ataúd, coloco algo de carbón, saco unos leños -por si las dudas-, marino unos pollos, meto cervezas al congelador y espero en una silla de la terraza, viendo hacia el árbol cuyo ramaje cubre casi en su totalidad el balcón. El Cucho se vuelve loco con tantos olores, tantos insectos y tanto sonido de pájaros.
Es domingo de terraza en Güffeldorf, esa pequeña y pacífica potencia mundial perdida entre las montañas de la ciudad de Monterrey, donde se fusila a quienes llevan platos y vasos deshechables o tiran las latas de aluminio en la misma bolsa donde pongo los restos de la comida. Sean bienvenidos a este civilizado y hermoso lugar.
... MI CUCHITO SE MERECE ESE DOMINGO, DESPUES DE QUE LO NEGREAS TODA LA SEMANA, JAJAJAJA.
ResponderBorrarFABIOLA
aquí en Cd. Valles, si salé la llorona pero no llorando por sus perros...
ResponderBorrarEsa es vida Guffo. Una vida simple y ya.
ResponderBorrarantes tenia una mala impresion de los chihuahueños, pero ahora he visto que son buena onda, me gustaria tener uno pero no se si pueda convivir con unas 3 iguanas de 3, 2 y un año de edad
ResponderBorrarAdorable el nuevo cucho.
ResponderBorrarSe llamará Cucho, o le pondrás otro nombre?
Saludos desde Venezuela
Se me antojó una carnita asada nomás de ver la parrilla y el carbón. Al lado una salsita de molcajete, pico de gallo y unas tortillas de harina recien hechas... tsssssssss
ResponderBorrarEn la foto del tomate pensé que eran gomibayas.
Los perros Chihuahua nunca me han gustado (lo dice un chihuahuense) y en general los perros pequeños. Se me hace que son demasiado nerviosos o enfermizos. Espero que el tuyo sea una de esas agradables excepciones.
Pues yo tengo un perro pequeño, un pomerania, y tiene más salud que muchos perros grandes que he tenido.
ResponderBorrarMe da mucho gusto que ya aceptes comentarios. Soy una lectora en anónimato durante mucho tiempo y me encanta tu blog y tus monos.
A mi sí me gustan los chihuahueños. Tuve una perrita así, pero de pelo largo. Se murió a los 8 años, porque como no tuvo perritos, le salieron tumorcitos y después de operarla, no resistió la recuperación.
¿Ya tiene nombre o vas a poner un concurso para que lo bauticemos? :p
Hubieras sembrado naranjas ¡Qué ricas están las condenadas! Y por estos lares se dan bien. Sigo hablando de naranjas, mal pensados.
ResponderBorrarA mí no me gustan los chihuahuas, siempre siento que explotarán en cualquier momento porque tiemblan bien cabrón.
No sé porque me acordé de Rocky 1 cuando el entrenador llega a su casa y le dice rocky "esas son mis tortugas. Son dos, está es una y... esa es la otra. Y esa, bueno, esa es una piedra" Rudo, sencillo y amante de los animales, como dios manda, o debería de mandar.
Pues que rico. Y qué buen domingo pasaste tú y el Chucho 2.
ResponderBorrarAbrazos.
Se antoja una carnita asada y que no?
ResponderBorrarSaludos
Rico domingo. Una pregunta Guffo, y en lugar de comprar otro perro no consideraste adoptar a uno? O eso no va contigo?
ResponderBorrarBienvenido, Cucho.
ResponderBorrarQué post tan ameno, me hizo sonreír mientras busco mi brújula.
Ele y Juan Pa
http://sailing-nena.blogspot.com/
Vientos mi Guffo. Una pregunta, ¿necesito pasaporte y visa para poder entrar a Güffeldorf?
ResponderBorrarEsta bien bonito! Se ve con mucha actitud y porte el peque;o, y ya lo tienes bien entrenadito.
ResponderBorrarY pense que le habias puesto Guffeldorf al perro cuando vi el titulo jeje
No puesss a perro regalado no se le mira colmillo.... jejejeje.
ResponderBorrarxD
Yo siempre he querido un cachorrín, pero el que me gusta cuesta no un ojo de la cara, sino un riñón más el hígado y un pulmón.... yo siempre digo quéeeee???, volteo a ver al cachorrín en la vitrina y digo "El mundo nos separa Pinkey, qué se le hará.... Lo nuestro igual no hubiera funcionado." y me voy.
Jejejejeje.
Lindo inicio de semana!!!
Se me cerró el mundo y le puse también Cucho, jeje.
ResponderBorrarAnónimo: No pensé en adoptar porque ya no quería la responsabilidad de otro perro. Pero me lo regaló mi mamá y, como dijeron por ahí: "A perro regalado no se le mira colmillo", jaja
Sir David, claro que no se necesita ni pasaporte ni visa, jejeje.
Buen inicio de semana.
Jejeje que bueno que ya tienes compañía de nuevo Guffo. Nada como un can, esos si saben ser compañeros, aunque a mi tampoco me gustan los perros pequeños.
ResponderBorrarSaludos...
desde cierta perspectiva pareciera que ese perro esta jalando la parrilla con el hocico.k
ResponderBorrarPonle Espanto!! o Panza!! o Pendulo de Focau... ah espera ya le pusiste nombre, chale, feliz inicio de semana!!
ResponderBorrarpinches perros feos....... con razon el pit bull se lo chingo, lo confundio con una rata.......
ResponderBorrarOye Guffo que tan cierto es que le estas vendiendo información al periodico el Norte sobre tu papa. Ya ves que trabajas (o trabajabas) en ese periodico y ultimamente es el único periodico que le han estado pegando a tu papá por lo de la constructora Coss que salió beneficiada. ¿Es neta lo que me contaron de que vendes la info que sabes? que eres algo asi como un infiltrado. Es mucha casualidad no crees?
ResponderBorrarAparte, esos del Norte tienen fama de haber chingado a su propio padre con el negocio. Yo creo que si tu quieres chingar al tuyo sacandole los trapitos al sol serías muy digno de la admiración de estos señores del periodico.
Anónimo: Ves muchas películas... No tengo relación alguna con el periódico El Norte ni relación con lo que hace o no hace mi papá.
ResponderBorrarAl periódico El Norte lo conocí 12 años, que fueron los que trabajé para ellos; y a mi jefe lo conocí 27, que fueron los que duré viviendo en su casa.
A los dos los conozco bien y sé cómo operan ambos; pero de eso a tu argumento hollywoodense, hay mucho tramo, jajaja.
Saludos.
jajaja, ahora me doy cuenta de porque siempre andas agarrando el pedo compadre, eres un infiltrado, y pues claro que te han de pagar millones de pesos por la información, y nada que la tienda de cajas es una tapadera para tus actividades de espionaje gubernamental.
ResponderBorrarche anonimo se la mamo.
Pues namas digo que me parece muy sospechoso Guffito. Tu que siempre te has negado a entrale a la politica y a gozar de las palancas y privilegio que pudieras gozar no meparece nada descabellado quee quisieras empinar a tu propio padre creyendo que sigues un ideal hippie y estúpido al que te has aferrado caprichosamente. Por tus escritos y la actitud que en ellos transmites me he dado cuenta que eres un ser egoísta que desprecia a todo el mundo, que no tiene amigos ni amor ni le interesa tenerlos. Alla tu...
ResponderBorraroye angello y el maricon del malhechecito ????
ResponderBorraresta en un manicomio por el trauma de caer por borrachito en la carcel ???
ya se suicido ?? o solamente trae una rabieta de mujer menopausica y no quiere postear ???
me saludas al putito ese......
Anónimo, creo que te equivocaste de trama. Estás hablando del pendejo de Jorge Castañeda Gutman, que me imagino que no has de saber quién fue, pero en tiempos de Fox fue Secretario de Relaciones Exteriores. Ese pendejo sí vendía secretos de estado a los cubanos, basándose en lo que oía en su casa o preguntaba a su papá . Jajaja. Y a cambio de una muy buena lana y claro, viajes a Cuba. De lo que tú hablas realmente son pendejadas...
ResponderBorrarAy, no tengo amor ni amigos, snif.
ResponderBorrarAhorita vengo, voy a suicidarme.
cuando vengas al df avísame, tienes que probar los sopes, la salsa borracha y el menudo que hace mi jefa
ResponderBorrarsaludos
chales guffo aveces siento que eres komo un "yo" en el futuro...
ResponderBorrarsolo que mas berrinchudo jaja
good vibz
in lak'ech...
chales guffo aveces siento que eres komo un "yo" en el futuro...
ResponderBorrarsolo que mas berrinchudo jaja
ya me dio miedo quedarme solito esperame voy contigo
good vibz
in lak'ech...
A todo esto, porque tienes un monillo de peluche con un agujerito en el jale? Sin comentarios jaja
ResponderBorrarOye guffubis y que hay de cierto que ese perrito es una aleacion de tu perro anterior con semen de extraterrestre, extraterrestre que encontraste enterrado en tu nueva casa mientras plantabas tus arboles, arboles que al parecer provienen del planeta avatar puesto que tu papa, como trabaja en la constructora Coss, dicen que trabaja para la CIA y la NASA construyendo estaciones espaciales y ese perrito sabe informacion que el Alarma, el Sureste, y Unomasuno, estan buscando sobre el verdadero origen de las especies, de que "toda materia es meramente energia condensada a baja vibracion, que somos una sola conciencia experimentandose en si misma subjetivamente, no hay tal cosa como la muerte, la vida es solo un sueño y unicamente somos nuestra propia imaginacion" BH.
ResponderBorrarAtte. soybienputoynopongominombre (carlos cabuto)