martes, julio 18, 2006

hola amiguitos del martes

Tengo un amigo que le da pena estarse quedando pelón. Neta que a ese güey le da chingos de vergüenza perder el pelo más que al diputado Kawaghi perder la dignidad con el luchador Cibernético. Será que a mí me vale madre o, simplemente, nunca pienso en eso cada que me veo en el espejo del carro, del motel o de tu madre. Cada que miro mi aparatosa frente, no pienso otra cosa más que Dios me puso una sandía en lugar de un cerebro. O será que nada de eso me mortifica porque le tengo mucha fe al sexo y a mis jabones mágicos de cacahuananche de 7 pesitos de esos que venden en el mercado y que dicen que combaten la calvicie. Mi compa el Pelochas siempre usa gorra y sombrero o se rapa por completo el poco cabello que le queda para así disimular su calvicie y disfrazarla como si fuera un “nuevo look” moderno. Lo peor es que es dos años menor que yo y siento que eso le pesa. Le he recomendado mis jabones y él prefiere comprar el Cre-C y los remedios que venden en la televisión y que anuncia la Galilea Montijo; pero los prueba sin ningún resultado. Toda esta situación me remonta a mi infancia, cundo mi jefe –pelón por cierto- me dijo que yo iba a ser un calvo de mierda irremediablemente. Recuerdo aquél otoño del 81, cuando perdí mis primeros dos dientes –los de leche te echo-. No quería ir al día siguiente a la escuela Montessori, pues temía que todos se burlaran de mí así como se burlaron de mis tenis de Gigante. Fui al colegio y trataba de no abrir la boca y que nadie me hiciera reír para que nadie se diera cuenta del huecote que tenía en el hocico. Así siento a mi amigo: que se siente solo y no se da cuenta que todos vamos para el mismo lado. Porque luego, en la primaria, me di cuenta que todos los niños y niñas del salón empezaron a pasar por la misma situación que yo: a mudar dientes y a que el pinche ratón culero no les dejaba dinero abajo de la almohada; y yo ya no era el único desdentado que tenía una portería en el hocico y ni un cinco en los bolsillos. Ya éramos varios. Y así va a suceder durante toda la vida, eso es lo que le digo a mi amigo el pelón acomplejado; que envejecer y estar pelón no es motivo de avergonzarse. Todos nos vamos a quedar pelones y nos vamos a arrugar de los ojos y nos vamos a aguadar de la panza y de los brazos y del cuello; y vamos a perder los dientes como en la primaria, como cuando teníamos 5 años y todo era novedad; y nos vamos a encorvar y a jorobar y a volver insoportables. Y nos van a meter supositorios por el culo y nos van a dar nuestra medicina y la vamos a escupir y nos vamos a morir y nos van a llorar y no es nada de lo que debamos sentirnos avergonzados. Porque eso pasa: se deja de parar el pito, uno se cansa, y la vagina se aguada, y el amor se acaba, y la costumbre mata, y uno se desilusiona y vive de la rutina y se amarga y se quiere dar un tiro y quiere recuperar lo que perdió y quiere dejar huella y la verga. Obviamente, todo esto es más llevadero –o placentero- si existe alguien en nuestra misma situación o en nuestra misma dimensión o canal o, simplemente, alguien que esté con nosotros para llevarnos a la tumba… pero que esté a nuestro lado siempre y nosotros queramos estar siempre a su lado.

15 comentarios:

  1. Motívate tu solo… no soy pelón, soy de ideas amplias

    Saludos

    ResponderBorrar
  2. Jajajaja, le cayo el saco a Manuel ehh!! jejejej, buen post, alburero, realista! Un saludo.

    ResponderBorrar
  3. Anónimo9:58 a.m.

    Tienes razón con la edad, vienen otras cosas mejores como la experiencia en muchas cosas, juventud divino tesoro...

    No hay nada peor que vivir una vejez ínútil...

    ResponderBorrar
  4. a algunos la vejez se les empieza a notar antes, pero tarde o temprano le llega a todos. muy lindo el post.
    saludos!

    ResponderBorrar
  5. mi guffo, este martes a llegado uste muy filoso

    ResponderBorrar
  6. Jajajaja un chingadazo de realidad para empezar el día.

    Saludos Guffo.

    ResponderBorrar
  7. Anónimo11:13 a.m.

    its trueeeee!!!, lo mas raro, esto ya lo habia platicado con mi pa un dia es q como q la vida te juega la mas pesada broma porque tu espiritu, lo de adentro pues sigue queriendo hacer cosas, pero tu cuerpo, ya no responde igual osea adquieres la experiencia, y ya tienes todo el tiempo del mundo pero tu cuerpo ya no es el mismoo.... bromitas de la vida.... saluditos!!! y pa ti, pa Manuel y los pre pelones o pelones don´t worry, el sex appeal, osea lo q nos atrae a las mujeres esta en lo de adentro de la cabeza, en la inteligencia, no en lo decorativo de afuera.... Happy tuesday

    ResponderBorrar
  8. gufo: a mi no me salia ni madres de barba ni bigote, me dijeron que cuando estuviera mamando panocha me restregara la barbilla en la pepa y que crees? ya me sale algo de barba!!!!, asi es que ya sabes, a remolinearte en la cucaracha con la cabeza y veras.
    ese consejo te doy, por que tu amigo fulano soy, jajajajajajajajajaja

    ResponderBorrar
  9. Mi querido guffo, este es un chistesito viejito viejito, pero aqui queda con madre...

    Dile a tu camarada que se frote papel higienico en la chompa y donde quiera que le crezca la mata, ese es el mejor remedio!!, asi la mata crecera en un dos por tres y si no te cree... dile que se vea la cola y pos...
    que mejor ejemplo que ese, ja

    Saludos carnal

    ResponderBorrar
  10. Esta con mad..e tu blog no se ni como llegue aqui pero me gusto un chorral ...

    saluditos
    ♥Srita&Don.Galleto..♥.

    ResponderBorrar
  11. Cuanta razón!
    Lo mismo he pensado cuando me sucede alguna situación bochornosa, porque como dicen: no hay nada nuevo bajo el sol,
    lo que sí es cierto es que algunos envejecen peor que otros, porqué quién va a ser feliz por tener llenas las piernas de várices y que parezca que un alien esté trepando por ellas? aunque el de enfrente o la compa del trabajo esté igual, como que no ha de ser consuelo,


    saludos!!

    ResponderBorrar
  12. Ahora que volvió a sacar a colación lo de los tenis Gigante, me acordé de un evento bien culero que vide en la primaria.

    Hallá por segundo año un compa de los más pobres que iban, un día llegó sin zapatos. Nombre! ches compas lo hicieron pedazos, lo cagaron hasta que quisieron y hasta las maestras le hicieron el fuchi. Que poca madre!

    No se me puede olvidar como se le fue llenando su cara de lágrimas.

    Pero bien dice usted, la vida da muchas vueltas y a ver si no quedaron luego en la misma situación jodida que él.

    ResponderBorrar
  13. "todos vamos para el mismo lado"

    A quedar pelones? jaja, por lo menos yo no. Neta. No me envidie, maestro, así soy de greñudo, peludo y cabrón.

    Otras cosillas si andan valiendo madre, pero un poquito nomás, por eso hay que tratar de conservarse en alcohol.

    Saludos compa.

    ResponderBorrar
  14. Qué pinche maestra tan gacha, jajaja, eso no se hace. Pobre batillo.
    Che Sivoli, te vas a quedar pelón como un cuate que siempre me echaba carrilla por mi amplia frente y ahora está más pelón que yo, juajuajua, cómo lo disfruto, jaja.
    Saludos a todos.

    ResponderBorrar
  15. Magnifico final maese guffo!


    Nada mas falto que nos cagaremos en nuestros choninos una y otra vez.

    ResponderBorrar