Alguna vez en este blog les platiqué sobre esos familiares que ni siquiera son tus familiares pero se sienten de tu familia. ¡Ah, qué molestos son! Y son molestos porque se dirigen a ti como si te trataran a diario y porque la única vez que te buscan es para pedirte algún favor.
Hace poco recibí una llamada muy incómoda; incómoda para alguien como yo, una persona que padece de sus facultades básicas para la interacción social. Sonó el teléfono, lo contesté y era una voz ranchera, de tonito golpeado, que me dijo:
-¿Qué pedooo, pinche primooo?, ¿cómo estás, cabróoon?
-¿Quién habla? –pregunté.
-¿Cómo que quién habla?, qué rápido te olvidas de la familia, cabróoon.
-¿Quién habla? –repetí. Si algo me encabrona –de entre las 1257364 cosas que me encabronan- es que cuando hago una pregunta me contesten con otra cosa que no sea la respuesta que pido. Como si estuviéramos jugando a las adivinanzas.
-¿Pues quién más, cabrón?, ¿cómo has estado, pinche primo?
-¿Quién habla? –subí el tono de voz, pues empezó a cagarme el palo quien estaba del otro lado de la bocina.
-¿Pues cómo que quién?, pinche primo mamón. Habla tu primo Reginaldo.
-Yo no tengo ningún primo con ese nombre.
-Cómo de que no, cabrón, no mames, primo: soy el esposo de la sobrina política de la tía abuela de la prima de tu papá: Anacahuita.
Con esos pinches nombres, ¿cómo no me iba a acordar de ellos? Al cabrón éste lo había visto una sola vez en toda mi vida -¡UNA!-, junto a mi supuesta prima!; y de eso hace ya como 15 años, pero el güey me hablaba como si fuéramos amigos de toda la vida y hasta me preguntó que “cómo estaban sus tíos”, o sea, mis papás. Ah, pinche vatito confianzudo...
Y conforme se alargaba la llamada, la plática se volvía más y más incómoda.
Y así como lo predije, fue. “Mi primo” necesitaba un favor. Necesitaba cajas de cartón y quería “saber precios” y “ver los descuentos”. Oh, no, qué horror.
Pero ahí no paró la cosa. Lo peor fue cuando me dijo:
-Mañana voy al negocio, para ver lo de las cajas, primo… ah, y para que conozcas a tu sobrina.
¡¿Mi sobrina?! Yo no tengo sobrinos, pinche igualado. Este cabrón confianzudo ahora cree que su hija es mi sobrina. ¡No mames, por favor! Nomás te pido que no mames, “primo”. Neta que qué pinche fastidio. En todo el día no pude pensar en otra cosa que no fuera eso; y en la noche no pude dormir pensando en que el cabrón iba a venir al negocio y me iba a presentar a una niña que en mi vida había visto, pero me reclamaba como “su tío”. ¡Qué pesadilla!
Al día siguiente solucioné el problema llamándole y preguntándole a qué hora vendría al negocio. “A las tres estoy por ahí, primo”, me dijo.
Y a las tres de la tarde no estuve. Obviamente el necio me marcó estando en el negocio, pero le dije que andaba con unos clientes y que no iba a llegar en toda la tarde, pero que ahí lo atendían muy bien. Lo último que me dijo, antes de colgar, fue:
-Lástima, primo: no vas a conocer a tu sobrina.
Uy, sí, de lo que me perdí, snif.
Hace poco recibí una llamada muy incómoda; incómoda para alguien como yo, una persona que padece de sus facultades básicas para la interacción social. Sonó el teléfono, lo contesté y era una voz ranchera, de tonito golpeado, que me dijo:
-¿Qué pedooo, pinche primooo?, ¿cómo estás, cabróoon?
-¿Quién habla? –pregunté.
-¿Cómo que quién habla?, qué rápido te olvidas de la familia, cabróoon.
-¿Quién habla? –repetí. Si algo me encabrona –de entre las 1257364 cosas que me encabronan- es que cuando hago una pregunta me contesten con otra cosa que no sea la respuesta que pido. Como si estuviéramos jugando a las adivinanzas.
-¿Pues quién más, cabrón?, ¿cómo has estado, pinche primo?
-¿Quién habla? –subí el tono de voz, pues empezó a cagarme el palo quien estaba del otro lado de la bocina.
-¿Pues cómo que quién?, pinche primo mamón. Habla tu primo Reginaldo.
-Yo no tengo ningún primo con ese nombre.
-Cómo de que no, cabrón, no mames, primo: soy el esposo de la sobrina política de la tía abuela de la prima de tu papá: Anacahuita.
Con esos pinches nombres, ¿cómo no me iba a acordar de ellos? Al cabrón éste lo había visto una sola vez en toda mi vida -¡UNA!-, junto a mi supuesta prima!; y de eso hace ya como 15 años, pero el güey me hablaba como si fuéramos amigos de toda la vida y hasta me preguntó que “cómo estaban sus tíos”, o sea, mis papás. Ah, pinche vatito confianzudo...
Y conforme se alargaba la llamada, la plática se volvía más y más incómoda.
Y así como lo predije, fue. “Mi primo” necesitaba un favor. Necesitaba cajas de cartón y quería “saber precios” y “ver los descuentos”. Oh, no, qué horror.
Pero ahí no paró la cosa. Lo peor fue cuando me dijo:
-Mañana voy al negocio, para ver lo de las cajas, primo… ah, y para que conozcas a tu sobrina.
¡¿Mi sobrina?! Yo no tengo sobrinos, pinche igualado. Este cabrón confianzudo ahora cree que su hija es mi sobrina. ¡No mames, por favor! Nomás te pido que no mames, “primo”. Neta que qué pinche fastidio. En todo el día no pude pensar en otra cosa que no fuera eso; y en la noche no pude dormir pensando en que el cabrón iba a venir al negocio y me iba a presentar a una niña que en mi vida había visto, pero me reclamaba como “su tío”. ¡Qué pesadilla!
Al día siguiente solucioné el problema llamándole y preguntándole a qué hora vendría al negocio. “A las tres estoy por ahí, primo”, me dijo.
Y a las tres de la tarde no estuve. Obviamente el necio me marcó estando en el negocio, pero le dije que andaba con unos clientes y que no iba a llegar en toda la tarde, pero que ahí lo atendían muy bien. Lo último que me dijo, antes de colgar, fue:
-Lástima, primo: no vas a conocer a tu sobrina.
Uy, sí, de lo que me perdí, snif.
Gracias a Diosito Bimbo que no tengo teléfono de casa y que la mayoría de mis parientes no tienen mi número de celular.
ResponderBorrarSi no, imagino que constantemente pasaría lo mismo, y más por mi profesión. "Àaandale, hazme un diseño, pero que no sea muy caro... y que tenga mucha calidad". Pffft.
Saludos.
Me perdí un poco en la explicación: "...soy el esposo de la sobrina política de la tía abuela de la prima de tu papá... " :-/
ResponderBorrarGente loca. Mi familia igual. Suelo decir que en una "junta familiar" si se pone una tela sobre el patio de la casa, se convierte en circo. :-)
Abrazo
Si como caga esa gente, y mas por que solo llaman cuando necesitan un favor. Yo por eso, si los vi, ni me acuerdo de ellos.
ResponderBorrarSaludos Guffo!!
"PADEZCO DE MIS FACULTADES SOCIALES".... QUE BUEN TERMINO PARA GENTE ANTISOCIAL COMO YO.
ResponderBorrarSALUDOS CHILANGOS!!
Perdona que te lo diga, pero esto es un bello ejemplo de cómo ser antisocial y mamón a la vez jajaja ¿Cómo no te acuerdas de tu primo?
ResponderBorrarBueno, al no estar ahí, te evitaste la pena de negarle que luego te pagara las cajas, porque creo que por ahí iba el asunto ;)
Eres muy tierno Guffo.
ResponderBorrarMe encanto este post! me cage de la risa! y la vdd que si, me cagan personas asi - sean o no de la familia.
ResponderBorrarYo creo que hasta en las mejores familias pasa eso jajajajaja
Saludos!
Ja ja ja... No compadre si eres de cuidado. Anotaré en mi libreta de "Cosas que no debo decirle al compaye" para no alterar tus facultades sociales, nervios, y/o demás traumas. Cof cof cof...
ResponderBorrarMe haz hecho reír.
Besos.
Al parecer sabe como ir a mandar a la ####... a la gente.... espero ir a monterrey para ver si puedo conseguir un autógrafo suyo en mi libro diarios del fin del mundo, aunque exista la posibilidad de que me mande a #### como si "primo" (correré el riesgo)... por cierto, yo normalmente los negocios los dejo fuera de los parientes, puedo sugerir que en reuniones son familia, en negocios son mercaderes el parentesco no existe...
ResponderBorrarLamentablemente, a veces es casi imposible no usarlo. Pero de verdad que hay formas no tan miserables de hacer uso del banco de favores...
ResponderBorrarPues que puto antipatico eres cabron no mames me caga la gente como tu digo la niña no tiene la culpa de la pendejada de los adultos se me hace que no fuiste niño cabron
ResponderBorrarCoincido!! Eres una ternurita!!!
ResponderBorrarAwww!!! si te veo algun dia, no hay bronca si te abrazo???
Lo bueno que mi familia es tan pequeña, que no hay "familiares" lejanos que acudan a nosotros!! Porque si los mandamos a la chingada... Sera por eso que nunca nos visitan? =/
Ojo: No soy mamón con quien se me acerca amablemente a saludarme o a pedirme que le firme el libro o a pedirme camisetas o calcas. Al contrario, lo agradezco mucho y hasta me sonrojo y me escondo detrás de mis trenzas como el indito que soy, snif.
ResponderBorrarLo que me caga es que... bueno, ya ni sé que es lo que me caga, jajajaja.
Saludos a todos y buen jueves.
jajajaja eso es ser un sociopata...jajaja
ResponderBorrarigual y el primo la rego por ser tan confianzudo.......
Suele suceder Guffo. A mi también me cagan esas cosas, como también me caga que en México nos empeñemos en decir que la familia son todos los: primos, los tíos, etc. Para mí mi familia son: mi esposa, mis hijos, mis padres, mi hermana y su familia. Fuera de eso pues la considero familia solo teóricamente hablando, pues es gente con la que no se comparte gran cosa y que posiblemente los amigos estén por arriba de ellos. A mí también me dicen antisocial, pero creo sucede que en México parte de nuestro fracaso viene de ese tipo de detalles. En otros países si les preguntas por sus tíos o primos posiblemente se rían y te contesten que no saben y que les importa un comino que pase con ellos. No se trata de ser amargado, es solo no ser hipócrita. Saludos desde Chihuahua.
ResponderBorrarQue tranzaaaa vatitooo
ResponderBorraroyeee ya leisteee un mundo feliz de Aldous Huxley?
Dice dos tres cosas chidas.
saludos Guffo.
y también me perdí en la prima politica de no se quién chingados.
pues mira yo para eso uso una lógica simple, los mando a la chingada... yo a veces ocupo algún favor pero se como pedirlo y pagarlo para que después no te lo cobren de sorpresa... jejeje saludos desde Mexicali, donde nunca hace calor (si como no...)
ResponderBorrarGuffo: vas a morir solo por mamon.
ResponderBorrarNunca aceptes un favor de nadie y si te lo hacen pagalo al costo o mayor de esa forma no vendran luego a cobrartelo. Los favores nunca son gratis y muchas veces el que los hace lo hace por un beneficio mayor. Me caga la gente ventajosa y por lo general abundan.
ResponderBorrarbah, todo mundo quiere hacer lo mismo, compadre.. pero pocos se animan, porque no es "políticamente correcto" hacerle el fuchi a "la familia"
ResponderBorrarTodos queremos hacer algo así, peor pocos nos animamos. Y los que no nos animamos sólo podemos decir "vas a quedarte solo por OGT" "qué mamón eres" "amargado" bla bla bla
Cobardía, pues.
Bah, yo digo que es raza que quiere hacer lo mismo pero no se atreve, compadre:
ResponderBorrarNo es políticamente correcto mandar a la chingada a la familia, por eso pocos lo hacen, pero de que se mueren de ganas de hacerlo, pues que no se hagan.
Saludos.
¿y si alguien se te acerca amablemente y te pide las naylon, se las das?
ResponderBorrarjajajaja.
saludos Primooooooooooo.
Sivoli tienes razon Chinga tu Madre Primo
ResponderBorrarja ja ja bien por ti guffo... como cagan el palo las confiancitas con familiares que ni al caso.. para mi que tu estas bien y todos los demas a la ch... no? pos al fin y al cabo si los que se sienten muy sociables se sienten ofendidos pues en pocas palabras que ni entren al blog y se vayan con su "socialité" a otro lado no? que inche necesidad de tratar de imponer su punto de vista como si fuera la verdad mas grande del universo???? tu guffo... muuuuy bien....!!!
ResponderBorrarCtm anonimo el unico con eggs aqui para poner cosas chidas es guffo tu acarreado de primera colgandote del guffo hazlo lo tuyo y deja al gran guffo en paz, y no te cuelgues medallas
ResponderBorrarPINCHE GUFFO ESTAS RARO, PERO ME GUSTA TU BLOG Y TU FORMA DE ESCRIBIR. TE ATREVES A DECIR LO QUE MUCHOS CALLAMOS.
ResponderBorrarCHINGON SIGUE A SI. UN LECTOR FIEL DE HERMOSILLO, SONORA.
PA MI QUE SI ALGUIEN SE LE ACERCA AL GUFFO NI UN BUEN ABRAZO LE DA... pa mí que da abrazos guangos jajajaja
ResponderBorrarGuangas tienes las nalgas, pinche aónimo culero de las 11 de la mañana hahahajajhahahjajhaahjahjahaja.
ResponderBorrarChinga btu madre Guffo.
Guffo, no te preocupes por no haber conocido a tu sobrina; porque seguro que cuando se acerque a sus 15 años, el igualado de tu primo te vuelve a llamar para pedirte que seas padrino de alguna pendejada de la fiesta.
ResponderBorrarCréeme, no falla.
Por cierto, ahora que ya saben dónde trabajas, podrán caerte sin avisarte antes. Chan chan chan chaaaaaaaaaaaan.
Life is a bitch.
Saludos.
Eso no es nada Guffo, mi ex novia me dejó por uno de sus "primos políticos". Una verdadera mamada, aunque muy cagado tu post.
ResponderBorrar¡Saludos!
ctm a todos
ResponderBorrarsi, todos vamonos mucho a chingar nuestra madre...
ResponderBorrarse soluciona cobrandoles a TODOS, parientes, amigos, conocidos, etc, etc.
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