Tanto me burlé de la influenza que el domingo amanecí con todos sus síntomas: fiebre, tos seca, cuerpo cortado, congestión nasal, etcétera.
Todo empezó el sábado al medio día, cuando no se me antojó una cerveza. “Aquí algo anda mal”, me dije. Por la noche, al intentar dormir, la garganta comenzó a rasparme y, en la mañana al despertar, me dolían los ojos y me hervía tanto la frente que se podía freír un huevo de pterodáctilo en ella.
“Tengo 8 años de conocerte y nunca te habías sentido mal”, me dijo preocupada mi enfermera del amor al momento que volteaba un par de tortillas de harina para hacer burritos en mi amplio comal facial.
Lo primero que pensé fue que alguien del gobierno gringo que tiene tratos oscuros con la industria farmacéutica se enojó mucho al leer mis post de incredulidad ante la influenza y me mandó el virus vía satélite en venganza; entonces, al contestar una llamada en mi celular, fue cuando me contagié. Suena lo más lógico, ¿no?
El caso es que ante mi negativa de ir con un doctor serio -de esos que no tienen gallinas desplumadas ni estampitas de la santa muerte en su despacho- estuve tirado dos días en cama, intentando curarme con métodos naturales: naranjas, papayas, mandarinas, líquidos, temporadas atrasadas de los Simpson y danzas rituales con lanzas alrededor del fuego.
Cuando mi madre se enteró de esto, me regañó y me dijo tajantemente que tenía que ver a un médico. Le puse como condición que iría sólo si me recomendaba a uno honesto, que no me fuera a retacar de medicamentos inútiles y me dijera: “En una semana vienes otra vez a consultarte para ver cómo sigues”. ¿Para qué chingados recetan tantos medicamentos si en una semana uno tiene que volver?
Total que me recomendó a un tal doctor Contreras que tiene su consultorio a un lado de la secundaria 10.
Pero ya saben cómo son las mamases de despistadas, que le cambian el nombre a todo y a Pedrito Fernández le dicen Pablito Hernández, a Tom Cruise le dicen Ben Kruzer y al Price Costco le dicen Prins Co.
Tomé el coche y manejé hasta la secundaria 10, como mi jefecita dijo, pero no encontré ni madres. La llamé por teléfono y le dije que si el consultorio estaba del lado de las florerías del panteón o del lado de la escuela, frente a la plaza.
-¿Qué panteón?, ¿qué florerías?, ¿qué plaza? –dijo mi amá.
No era la secundaría 10 a la que se refería, sino a la secundaria 20. Total que manejé hasta la secundaría 20, que está en el otro extremo de la ciudad, y, en efecto, el consultorio estaba a un lado de la escuela, pero el galeno no se apellidaba Contreras, sino Cortinas. Y estaba cerrado.
¡Ay, estas jefecitas! De la risa que me dio, ya hasta me curé.
Espero seguir por muchos años pasándome por los huevos a la ciencia y a la medicina moderna.
Guffo:1, Influenza: 0. ¡Unga Bunga!
Todo empezó el sábado al medio día, cuando no se me antojó una cerveza. “Aquí algo anda mal”, me dije. Por la noche, al intentar dormir, la garganta comenzó a rasparme y, en la mañana al despertar, me dolían los ojos y me hervía tanto la frente que se podía freír un huevo de pterodáctilo en ella.
“Tengo 8 años de conocerte y nunca te habías sentido mal”, me dijo preocupada mi enfermera del amor al momento que volteaba un par de tortillas de harina para hacer burritos en mi amplio comal facial.
Lo primero que pensé fue que alguien del gobierno gringo que tiene tratos oscuros con la industria farmacéutica se enojó mucho al leer mis post de incredulidad ante la influenza y me mandó el virus vía satélite en venganza; entonces, al contestar una llamada en mi celular, fue cuando me contagié. Suena lo más lógico, ¿no?
El caso es que ante mi negativa de ir con un doctor serio -de esos que no tienen gallinas desplumadas ni estampitas de la santa muerte en su despacho- estuve tirado dos días en cama, intentando curarme con métodos naturales: naranjas, papayas, mandarinas, líquidos, temporadas atrasadas de los Simpson y danzas rituales con lanzas alrededor del fuego.
Cuando mi madre se enteró de esto, me regañó y me dijo tajantemente que tenía que ver a un médico. Le puse como condición que iría sólo si me recomendaba a uno honesto, que no me fuera a retacar de medicamentos inútiles y me dijera: “En una semana vienes otra vez a consultarte para ver cómo sigues”. ¿Para qué chingados recetan tantos medicamentos si en una semana uno tiene que volver?
Total que me recomendó a un tal doctor Contreras que tiene su consultorio a un lado de la secundaria 10.
Pero ya saben cómo son las mamases de despistadas, que le cambian el nombre a todo y a Pedrito Fernández le dicen Pablito Hernández, a Tom Cruise le dicen Ben Kruzer y al Price Costco le dicen Prins Co.
Tomé el coche y manejé hasta la secundaria 10, como mi jefecita dijo, pero no encontré ni madres. La llamé por teléfono y le dije que si el consultorio estaba del lado de las florerías del panteón o del lado de la escuela, frente a la plaza.
-¿Qué panteón?, ¿qué florerías?, ¿qué plaza? –dijo mi amá.
No era la secundaría 10 a la que se refería, sino a la secundaria 20. Total que manejé hasta la secundaría 20, que está en el otro extremo de la ciudad, y, en efecto, el consultorio estaba a un lado de la escuela, pero el galeno no se apellidaba Contreras, sino Cortinas. Y estaba cerrado.
¡Ay, estas jefecitas! De la risa que me dio, ya hasta me curé.
Espero seguir por muchos años pasándome por los huevos a la ciencia y a la medicina moderna.
Guffo:1, Influenza: 0. ¡Unga Bunga!
uuuuy compa..aguas con la influenza, esta de regreso en estas polvorientas y rascuaches tierras
ResponderBorrarYo igual, hoy me siento morir, pero chingo mi madre si voy al matasanos!
ResponderBorrarjajaja
ResponderBorrarcon razon te extrañamos estos días! ;)
Mi abuelita te hubiera dado un té de Flor de bugambilia jajaja.
Yo te mando un saludo y un beso (con cubrebocas) juarjuar
Es broma!!!
Que tengas buen Día!
Saludos!
SHI
ofrenicos y de los medicuchos junto con sus familiares y amigos a lincharte y de pasada cagotiarme ami
ResponderBorrarpero de una vez slos digo me valen madres sus reclamos jua jua jua
Shercas del bajio
Jajaja ay tu amá, qué chistoso.
ResponderBorrarMi abuela es igual, me hace pasar mil carcajadas, además de que tiene el tacto y la sutileza de un elefante para decir las cosas y cuando se confundía de nombres con tantos nietos me decía "porquería".
Aaahh el amor de los abuelos...
yo como todo buen macho y fanatico de la medicina alternativa me hago un hoyo en la palma de la mano pa que se salgan los malos espiritus,
ResponderBorrarJajajaja, pinche risa que cura todos los males!
ResponderBorrarPues yo tampoco creía pero ya conocí a un cuate que se contagió la semana pasada de la influenza, pero ayer ya regresó a trabajar y hasta a comer fuimos y el wey tosiéndonos en plena cara y hacia nuestros alimentos, jaja.
ResponderBorrarYo le dije: Sobre tu tumba escupiré. A mí no me hace nada el virus del A HILI. (Ay wey dije lo mismo que la Gordillo).
Saludos.
Jajajaja
ResponderBorrarLo que no sabes es que todo era un plan con maña de tu 'ama para que con todo ese viaje que hiciste, tu sistema inmunológico se activara y solito te curaras
Regresa a la medicina tradicional mi estimado Guffo, una buena friega y consumir una dosis de ajos y veras como sudas y sacas la gripa... y olvidese de la influenza
ResponderBorrarSaludos
"Le puse como condición que iría sólo si me recomendaba a uno honesto, que no me fuera a retacar de medicamentos inútiles..."
ResponderBorrar¿Y cómo puedes saber que son inútiles si no te los has tomado?
De pronto me recordaste a Rius.
Un Abrazo.
No se burlen, la profa Elba Esther ya dijo que hay otro tipo de influenzIa, la A-HLNL... ¡No es para andar jugando cosas cosas!
ResponderBorrarua ua ua uaaa uauauaua uaaaa!!!
ResponderBorrarahi la ve
"Amplio comal facial" jajajjajajajajaja buenisima esa!
ResponderBorrarPues por lo visto solo te hacia falta que te diera el sol y el airecito limpio de Mty para alivarte.
Ah si, y reirte y llorar un poco por lo de tu madre... Asi son todas jeje
Saludos y que bueno que estes bien =)
Ese mi Guffo!! curese como los perritos callejeros!! coma zacate!!!
ResponderBorrarSaludos!!!
Jeje Guffo si es pura guaza el blog no se por que se puso tan denso el pedo de la luna, jeje.
ResponderBorrarSoy Químico y pues la neta me late la ciencia. Y creo que el pedo no es la ciencia si no los médicos que se pasan de cabrones, cobran un chingo y nunca hacen nada por uno!!
Saludos
Guffo.... de los casi 400 seguidores que tienes no hay ni una sola vieja guapa o buena y las que parecen estar buenas ni enlace tienen a su web, por lo que considero que han de ser puro pedo.
ResponderBorrarPinche internet es una mierda para encontrar viejas buenas.
jajaja el anónimo me hizo reir jajaja, la verdad las viejas buenas no existen en la red asi como los hombres guapos pero bueno de q hay tipas inteligentes las hay ajjaa.
ResponderBorrarEspero ya estes mejor y claro q no es influenza lo q tenias sino un resfriado, solo q ya estamos traumados con tantas noticias alarmistas..
besos
ME EXTRAÑA QUE NO HAYAS RECURRIDO A NUESTROS EFICIENTES, BARATOS, DESAHOGADOS SISTEMAS PUBLICOS DE SALUD ESTAN PREPARADOS PARA ATENDER LA CONTINGENCIA, LA INFLUENZA CONTABA CON TODO...MENOS CON NUESTROS EFICIENTES POLITICOS, ASI QUE ESTE INVIERNO, QUE PREDICEN TERRIBLE PANDEMIA, A MI ME VALE, HAY SUFICIENTES MEDICAMENTOS PA' TODOS.
ResponderBorrarah jijos...se vale soñar!!
¿Cómo sabes que era influenza si nadie te diagnosticó?
ResponderBorrarNo cantes victoria. XD
Anónimo 7:12 PM
ResponderBorrarLas viejas buenas nunca tienen problema para que las saquen a pasear. Las feas se quedan a pasar el tiempo en Internet. Ya deberías saberlo.
Servicio a la comunidad. XD
ASH!... si no fuiste al médico, cómo sabes que tuviste influenza?... YO NO TE CREO!
ResponderBorrarjajaja... ntc.
Y ÓYEME!...cómo que dudas de la honestidad de un Médico?... nunca dudes de su honestidad, duda de sus conocimientos si quieres, jajajaja.
Naaaa, es que hoy en día hay de todo, te comprendo, pero pues de que tienes acudir al médico, tienes que acudir.
:D
Ah, pero aunque se mueran por la influenza van a seguir negando su existencia...
ResponderBorrarCarajo, gente que se las da de "escéptico" cuando sólo es un pendejo más porque quiere serlo.
Aún así, con todo y tu pendejez te envidio porque ya posees inmunidad. Te debió haber tocado la segunda oleada o la tercera, nomás para que te doliera un poco más.
Hahahahaa aaah como reí. Yo pienso lo mismo era un resfriado nomás que andamos histéricos con tanta alerta sanitaria hahaha. Y del anónimoo jajaja aaay Dios Mío que patético es buscar mujeres -u hombres- por internet pero bueeeno
ResponderBorrarjajaja rifaste con el final "pasarme por los webos a la ciencia y a la medicina" yo tambien hace poco me enferme de una gripa y mi adorada eposa me queria llevar awebo al doctor le dije ni maiz! me awante deje que mi cuerpo se pusiera a chambear y mis defensas por arte de magia expulsaron al demonio en un par de dias!!
ResponderBorrarmira que casualidad no necesite de los inventos del hombre blanco!! ni una sola pinche pastilla fue necesaria.
¿Ir al médico teniendo Internet? ¡Nunca!
ResponderBorrarSi nomás busco los síntomas en Internet -en una página seria de medicina-, me dan el diagnóstico y hasta me dice cómo curarme.
¿No sabían que tooodos los argumentos serios, los conocimientos científicos, tecnológicos y de verdades asbolutas se encuentran en Internet? ¡No sabían que ya todos somos doctores, científicos, astrofísicos, astronautas y eruditos con sólo darle varios clicks a Internet?
Que vayan al doctor los blandengues e ignorantes: yo tengo Internet.
ayer que fui al casino de Valle Oriente, me encontre a tu FABY que iba con un acompañante alto y apuesto sentaditos muy juntos jugando en las "maquinitas".
ResponderBorrarAyúdame a polear contra la varicela!
ResponderBorrarmándame algún menjurje gufolesco
Pos andas con la Faby o no andas?
ResponderBorrarSon swingers o que pedo???
Ke chingaos te importa, pinche anonimo metiche!!! cada kien sus ondas no???
ResponderBorrarJuar, juar, muy buena mamada Guffo, pero no creo que haya sido Influenza, a los mas, una gripa aviar...
ResponderBorraruna pregunta
ResponderBorrar¿es tu papa?; no es que este mal, ¿pero verdad que es dificil andar escupiendo siempre?
Fuente: http://impreso.milenio.com/node/8630459
En Privado
Joaquín López-Dóriga
"3. IGUALES. No ha protestado el cargo y el diputado del PRI Gustavo Caballero ya pidió viáticos y pasajes para viajar a Ecuador, a un ¡Encuentro de Museos Ferroviarios! que en México no hay. Si el poder los hace iguales."
Verde!!!! con el anonimo anterior
ResponderBorrarAchinga. ¿Pos que tu papá no pidió licencia desde hace un chingo cuando se metió a la campaña de Rodrigo???? O hay otro Gustavo Caballero??? Hay un Benito Caballero y otro Caballero pero no recuerdo el nombre.
ResponderBorrarQueremos respuestas Guffo.
Gufffoooo tus lectores tenemos muchas dudas:
ResponderBorrarSi es tu papa ese diputado o tu papa es diputado local o ya no es diputado
Andas con fabi, con quien andaba fabi en el casino, era su hermano, su ex marido, un amigo, un pretendiente.
Merecemos saber porque venimos aqui a leerte siempre.
Yo ya busqué en todo interné y no hay nada que confirme que la influenza se transmita vía satélite por el celular.
ResponderBorrarJajajaj!! no menosprecies a mi amada medicina moderna =P
ResponderBorrarSin esos analgésicos y antibióticos milagrosos estaría pudriéndome.
Ya lo sabrás cuando necesites una operación.
Ya respondí arriba, para todos esos "mortificados"
ResponderBorrar