Al Zurdo le faltó oxígeno al nacer, por eso la parte derecha de su cuerpo estaba atrofiada.
La mano la tenía así: como que toda engarruñada. Cuando movía el brazo malo parecía una excavadora Caterpillar y sus dedos garras. De la pierna derecha nomás cojeaba.
Creo que el Zurdo llegó al barrio vendiendo “bolis” -una bolsas de plástico con agua de sabores congelada dentro- en una hielera que cargaba con la mano izquierda. Contaba las monedas con la mano macueca y nunca aceptaba nuestra ayuda, no sé si por desconfiado o por no sentirse inútil. Nos hicimos amigos de él de volada.
Una vez, mientras contaba las ganancias del día, llegó un amigo por atrás y le picó las costillas para asustarlo. “¡Aaaay, amá!”, gritó el Zurdo todo espantado, mientras la mano macueca se elevaba por los aires soltando monedas para todos lados. Reímos como nunca.
De ahí en adelante aprovechábamos cualquier oportunidad para picarle los costados y ver cómo le saltaba la manilla al ritmo de su “¡Ay amá!”. Cuando llegaba alguien nuevo a la cuadra, le enseñábamos cómo apachurrarle el botón imaginario al Zurdo para que hiciera su gracia. Cuando se hartaba, nos perseguía con la mano tullida en alto, sostenida por la mano izquierda, mientras blandía los dedos como si fueran los tentáculos de un calamar para ponérnosla en la cara. El Zurdo sabía que eso nos provocaba repulsión, a pesar de que lo apreciábamos.
-Y a poco sí le la jalas con la izquierda, pinche Zurdo –preguntaba un amigo.
- No, no me la puedo jalar: me hace daño –decía al mismo tiempo que se tocaba la cabeza.
-Entones, por lógica: nomás el huevo izquierdo te funciona, ¿no?
Todos echábamos a reír.
Desde los escalones de casa de Doña Pelos veíamos cuando el Zurdo se aproximaba al barrio, entonces le cantábamos una rola de Ricky Martin, muy de moda en aquella época, que decía: “Tú-uuu, loca manillaaa…” y nomás movía la cabeza y se reía, como pensando: “Ya van a empezar estos cabrones a joder”. Casi siempre salía Doña Pelos a corrernos.
Hace poco me topé al Zurdo. Andaba vendiendo sellos de goma puerta por puerta. No sé si le vaya bien, pero andaba muy bien vestido el güey. Me reconoció, me abrazo y le pregunté que qué andaba haciendo por esos rumbos.
-Ando vendiendo sellos de goma, güey, y sigo ayudándole a mi papá en el taller de serigrafía.
Me tendió su tarjeta con la mano macueca. Tarjeta y toda la cosa traía el pinche Zurdo. La verdad me dio mucho gusto. Le dije que posiblemente necesitaría algunos jales para el negocio de cajas y quedé en hablarle. Nos despedimos, nos abrazamos y el Zurdo siguió caminando con su maletín guindo sostenido en la mano izquierda.
Antes de doblar en la esquina, imaginé que lo contrataba en el negocio como “ponedor oficial de sellos”. Lo pararía frente al mostrador, colocaría unas notas de remisión delante de él, le pondría un sello de goma de PAGADO en la mano macueca, me colocaría a sus espaldas y le picaría las costillas: “¡Aaaay, amá!”, gritaría el Zurdo mientras le brinca la mano, y: “¡PUM!”, quedaría sellada la nota.
Ja ja ja que malos pobre zurdo, mucha imaginacion la de usted.
ResponderBorrarUn saludo
jajjaaj che gufo, chidilla la anécdota, eso me recuerda de como a veces los niños llegan a ser compartidos, respetuosos pero a la vez crueles
ResponderBorrarssaalud2!
jajajjajajajajajajajajajajajjajajajaja
ResponderBorrarnu mameeees...jajajajja
tuu loca manilla...jajjajajajajajjajajjajajjja
nosotros en la prepa 15 madero teniamos un maestro que le deciamos "el manitas", ya sabras por que, pero este wey era mas amargado y libidinoso y cuando queriamos salir temprano de su clase, le obsequiabamos como tributo a alguna chava del salon, osea, que una morra del salon se ofrecia para tirarle rollo y lo ponia feliz hasta que "el manitas" daba su manita a torcer y nos dejaba salir tempra....
nunca se nos ocurrio cantarle esa rola, hubiera sido la mamada....jajajajjajajajajjajajajaja
aaa che guffo, esos post te alivianan el dia...
jajajajajaj saludos!!!
Parece que ya termino la temporada de amargura y vienen mejores vientos para el blog del Guffo.
ResponderBorrarRecuerdo en la universidad a un compañero en las mismas condiciones, solo que este amigo, por pena o por lo que sea, traia la mano siempre dentro de la bolsa del pantalón, a raiz de eso unos culeros le clavaron el "¡Yo pago!" (¡¡Hagame uste el chingdo favor!!)
Es chido leer recuerdos como los tuyos amigo, los niños son re cagados.
ResponderBorrarAh como me dio risa el post jejeje. Aca en la uni habia un maestro que caminaba cojeando y le deciamos El inmortal... porque nunca iba a estirar la pata jajajaja. Y mi carnal a un vato que estaba manco le decia el Nemo jajajajja... ah raza.
ResponderBorrarSaludos!!!
que bien por el zurdo
ResponderBorraray luego me pasas el tel de los sellos por que quiero que me repliquen un sello que me regalaron con mi nombre en coreano
saludos
GuxXxo: ¡Pinche mamey!
ResponderBorrarMe rei como nunca con la idea de ponerlo como sellador.
ResponderBorrarMe cae que no es mala idea.
Jaja que manchado. Pero cuando me mandaron a hacer mi servicio social a una especie de DIF (más a huevo que nada, pedi mi cambio a la PGJ porque me latía la Criminalistica) ahi conocí al buen Victor, un niño con sindrome de Down, además tenía problemas de psicomotricidad por su constitución física, pero el inteligentemente sacaba ventaja de ello porque era gordito y por ende sus manos no podian agarrar la mayoría del material del taller del DIF y eso le molestaba, debido a su robustez se aprovechaba de las compañeras chaparritas y las metia a un salón y cerraba la puerta para tratar de propasarse con ellas.
ResponderBorrarDespués me entere que había sido procesado por abuso sexual.
un amigazo de la prepa me hablo dos veces por telefono a mi casa despues de como siete años y lo mande a la verga, ay que culero soy snif sniy y otra vez snif....
ResponderBorrary a todos mis amigos de la facultad tambien los mande a la verga snif snif y recontra snif
inche Guffo jajaja me hiciste recordar a la Doña Pelos que se enojaba porque a todos los de la 50 nos gustaba sentarnos en sus escaleras y nos corría a cubetazos de agua ardiendo jajaja
ResponderBorrarBuena onda Guffo, me laten estos post, es la primera vez q t comento aunq tengo ya mas del año leyendote, siempre es grato leer tu diario, con todos sus colores, como venga, esbozan casi siempre una sonrisa. bueno bueno dejemonos d joterias! jeje ..recibe un fuerte abrazo desde minatitlan, veracruuuj!
ResponderBorrarIncreíble que blogs peores y sin sustancia reciban mas comentarios que este. No tengo la menor duda que eres buen redactor, muy buen dibujante y buen humorista, por eso digo que es una lástima que no se te aprecie como deberian. Aparte, eres galán. Tal vez a la gente le molesta o no soporta ver tantas cualidades en una sola persona.
ResponderBorrarEn fin, yo te leo desde hace mucho tambien.
Macueca. Gracias, aprendi una palabra nueva.
ResponderBorrarTe pasaste ocn lo de caterpillar, jeje hasta de marca y todo
Pero le llamas para algún trabajo en el negocio de cajas, no vayas a aplicar la que otros te han hecho con "igual y ocupo cajas en el jale, yo te aviso..."
ResponderBorraryo te aviso... ¬¬
jajaja pinchi guffo cabron xD.
ResponderBorraren la familia de mi papá cada hermano, tiene por lo menos in hijo varón zurdo... pero nadie tiene la mano cuchita!
ResponderBorrarque weno eres, promoviendo fuentes de empleo!
t la mamaste guffo kn el pobre zurdito hahahhaa me lo imagine todoooooo en el mostrador, shingaos kmo somos k no perdonamos, me stoy poniendo al tanto del blog pork tenia kasi 20 dias sin leerlo, dejame me sigo riendo shingos
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