viernes, agosto 12, 2005

recuperando la infancia en las alturas...

Me han dicho que tengo el síndrome de Peter Pan; quesque porque no quiero crecer. Y no es que yo sea un hombre chaparro, sino que, cuando me salió el primer pelito en las polleras, me asusté. "Valió madre", me dije, "este mundo quiere que lo agarre por los cuernos, este pelo en mi canica derecha es la señal". Y me hice adulto sólo porque se me tupió de maleza ahí abajito del ombligo y las bisagras me empezaron a oler a suela de ganadero; no porque quisiera. Pero como sabrán, el pinche Guffo se la pasa haciendo posts de su infancia traumática de la que no se quiere desprender. Por eso, los aburriré con más recuerdos de ella. Recuerdo que de morro, me causaban horror las arenas movedizas, a pesar de que en las películas decían que nomás existían en el Amazonas. Pensaba que en cualquier monte baldío me encontraría con una; de hecho, me hubiera gustado encontrarme con una arena "moveliza": que mis amigos se hundieran en ella y yo rescatarlos como en las películas como la de Krull. Recuerdo que me tronó un oído en un avión y otro en una alberca; y que me sentía muy chingón porque yo me había subido a un avión a los 5 años y mis hermanas hasta ya bien peludotas, como a los 13 o 14, juarjuar, pinches naquillas, no se me olvidan sus caras de trauma cuando el avión despegó la primera vez que volaron, juarjuarjuar. Chingao, recuerdo que me entretenía de a madre con unos binoculares que tenía mi jefe: los tomaba, los enfocaba y veía a lontananza, la vecina, juarjuar, no, no es cierto; veía a lontananza y levantaba el brazo tratando de agarrar lo que parecía tan cercano: una montaña, un poste de luz, la rama de un árbol, tapar la chimenea de la fabrica de humo… Desde acá arriba todo se ve bien chiquito, casi nada se alcanza a percibir. Ahora me doy cuenta por qué Dios no se da cuenta de tanta barbaridad y tanta decadencia.

12 comentarios:

  1. Que fregon es recordar nuestra feliz infancia hace unos 2-3 dias mi hna mi prima y yo nos acordabamos d cada babosada k haciamos d chikitas d lo k se usaba en akellos tiempos y lo gasho d ser "adultos" es k uno deja d creer en chingos d cosas k al final d kuentas es lo k nos hacia felices... por eso k le valga riel don guffo0.. preferimos ser unos niños felices k unos adultos realistas... salu2 buen día

    ResponderBorrar
  2. a mi tambien se me revento un oido la primera vez que me subi a un avion y me la pase todo el vuelo llorando y mis jefes creian que lloraba porque tenia miedo.... ches jefes!

    ResponderBorrar
  3. Yo he sido muy peludo desde siempre, tanto que de peque me decian "el mono", asi que los pelos en las canicas (bombonas jeje) no significaron para mi el fin de mi niñes (o como se escriba), creo que mas bien fue el hecho de que me empesaron a gustar las cosas que tenian las niñas y que no tenemos los niños, las inquietudes que acabaron con mi infancia fueron algo asi como: "por que las habrá de distintos tamaños?"... "estaran suavecitas?", "por que a mi tia no le molesta mostrarlas cuando le da de comer a mi primita, pero me dió una bofetada cuando le dije que me las muestre?"... "sera que sepan a lo mismo las dos... o la derecha es de chocolate y la izquierda de vainilla..."

    Algunas de estas preguntas siguen sin respuesta.

    En fin, bellas epocas aquellas.

    ResponderBorrar
  4. Neta guffo, no se como te acuerdas de tantas cosas de tu niñez, yo nomas me acuerdo o de las muy gachas o de las muy buenas experiencias, pero de ahi en fuera nada. :P
    Luiz
    http://luiz.bitacoras.com

    ResponderBorrar
  5. que onda guffo!! como estas? espero que de maravilla!! pase a saludar y desearte un excelente fin de semana!! cuidese

    ResponderBorrar
  6. tamos iguales guffiño... yo x mas q la vida me cachetea no quiero dejar la infancia jajajaja
    y la pubertad :P

    x lo menos todavia me siguen pidiend identificacion jajaja

    me gustan mucho tus posts reseñosos

    q tengas bonito fin y saludos a tu fabi!

    ResponderBorrar
  7. Que bueno que ya mandaste a la verga a los pinche anónimos.

    Carnal, pues hablar de la infancia es tu estilo, pocos como tu tratan esas anécdotas. Yo la primera vez que viejé en avión, casi me vomito.

    Saludos y buen fin de semana bro.

    ResponderBorrar
  8. yo tambien tenia binoculares, nunca entendi porque tenian dos hoyos para los ojos pero solo se podia ver por uno a la vez. si tratabas de ver por los dos se veia mal.

    ResponderBorrar
  9. No me canso de decirle compadre... Que retebonito platica uste!

    ResponderBorrar
  10. pues es bueno recordar la infancia porque nos hace sentir cosas chingonas y le causa risa a los demas, como la vez que quize aplicar la de mary popins con una sombrilla y me luxe un tobillo que me incapacito un mes. como sea buen post del recuerdo y le dejo un saludo

    ResponderBorrar
  11. ni me digas que esas son las razones por las que te hiciste adulto... los pelicanos en la bahia!! digo que no porque mi hijito de 4 anios se muere por estar peludo! pelito que se encuentra me dice que si ya es grande... nooooo...
    saludos.

    ResponderBorrar
  12. weeeeeeeeeeeeeeeeeeeeey... yo también tengo ese síndrome... el pex es que a veces también me da por querer volar... bueno, esos ya son otros rollos existenciales :P

    ResponderBorrar